Cornucopia | Charlie Billingham
Del 5 de febrero al 12 de mayo, 2019
Para crear sus pinturas, Charlie Billingham recurre a fragmentos de imágenes, de dibujos y bocetos históricos británicos. Se interesa sobre todo en los grabados satíricos de finales del siglo XVIII y principios del XIX, que en su mayoría se produjeron durante la época georgiana tardía y la Regencia. Al echar mano de imágenes de artistas como James Gillray (1756-1815), Thomas Rowlandson (1756-1827) y George Cruikshank (1792-1878), Billingham toma elementos y aspectos de las caricaturas originales y las re-imagina recortándolas, manipulándolas e incorporándolas como collage. Al hacerlo, las despoja en gran medida de su contenido político y narrativo original para crear sus propias composiciones, más ambiguas.
Billingham suele exponer sus pinturas con instalaciones donde utiliza grabados y textiles que evocan interiores decorativos caseros. Para la presente exposición, se pintaron a mano las paredes con sellos basados en acuarelas del propio artista. Una de las pinturas cuelga sobre un gobelino que él diseñó y mandó elaborar en Bélgica. Las figuras de esa pintura miran hacia fuera del marco al campo gestural abstracto de los colores tejidos en el tapiz.